Hay un joven tutor pervertido que roba en secreto los sostenes y las bragas de las alumnas a las que les enseña a oler, esa es la imagen del tutor en esta película.
No solo se detuvo allí, también invitó a Koharu Suzuki a masturbarse con un juguete sexual que él trajo de casa para que ella fuera estimulada por el placer y él pudiera tomar posesión libremente de este cuerpo regordete y voluptuoso. No hubo resistencia ni descubrimiento por parte de los padres. Las acciones de este tutor pervertido y hambriento de amor son muy condenables. La enseñanza no es buena, sólo es mala.